Narrar la arquitectura y el ambiente: el dibujo del pensamiento y las emociones

Resumen

Cada dibujo es una narración, compuesta por signos, colores, transparencias,
relaciones entre las partes; en cada dibujo se crea un equilibrio entre imágenes
y pensamientos capaces de establecer un nexo entre el espíritu del ejecutor y el
de los observadores. El realizado a mano, gracias a su personalidad y unicidad,
y a la capacidad de crear una relación entre la materialidad y la inmaterialidad de
imágenes y pensamientos, todavía hoy se revela un instrumento de comunicación
indispensable e insustituible; su narración e interpretación se amplifi can
dependiendo del modo en el cual cada persona recibe los estímulos visuales y
emotivos transmitidos por el dibujo mismo.
Aunque el advenimiento de representaciones digitales cada vez más innovadoras
hace que se ponga en discusión, el dibujo del boceto constituye, y todavía sigue
siendo (lo documentan muchos estudios recientes), un elemento fundamental
para el arquitecto, gracias a su inmediatez y las vibraciones interpretativas
implícitas en el mismo, defi niendo un vínculo indisoluble entre pensamiento
y gestualidades gráfi cas, y transmitiendo además de los aspectos formales,
pensamientos y emociones.
La intención de esta aportación es poner en evidencia el modo en el cual dicho
vínculo resulta basilar en el lenguaje arquitectónico, tanto en el proyecto como
en el estudio de lo existente, para transmitir los puntos fundamentales de
arquitecturas o de espacios urbanos, y las implicaciones emotivas instauradas
entre el hombre y el ambiente.
Tomando como referencia cultural los bocetos de proyectistas que han dejado
un signo en la historia de la arquitectura contemporánea, y al mismo tiempo
mediante el análisis de algunos ejemplos de arquitectos menos notos, surge de
manera evidente el modo en el cual todos “fi rman” su dibujo mediante un
estilo personal de concebir el espacio y de expresarse utilizando precisamente
el dibujo como instrumento de comunicación capaz de subrayar los aspectos
peculiares de la construcción y del ambiente. Una confi rmación, por lo tanto, del
papel insustituible del boceto arquitectónico como manifestación del articulado
e indisoluble proceso que une la mente y la mano.